Aproximación a las causas, consecuencias y soluciones a la crisis

Cuando nos enfrentamos a un problema, parece que nuestra mente está predispuesta a, antes de nada, plantear soluciones. Nuestra cultura latina es especialmente proclive a dedicar mucho más tiempo a probar soluciones, en ocasiones con sistemas de acierto - error, que a analizar las causas de los problemas. En los ejercicios, mas o menos sinceros de análsis de la actual crisis, el objetivo frecuente es proponer soluciones y no tanto identificar causas y consecuencias.

Existe una tendencia a valorar la identificación de las causas como búsqueda de culpables, revanchismo o manifestación de negatividad. Dentro de las Organizaciones es frecuente la sentencia "no acepto ningún problema sin propuesta de solución" perdiendo así la información sobre el problema y, por supuesto, también la solución. La dedicación a la solución se percible más proactiva que la identificación de las causas, por muy importante que están sean para la solución del problema.

Consecuencia de lo mencionado es que, finanlmente, nos sumergimos en una noria de implantaciones de soluciones que nos lleva a tocar la mayoría de las variables que determinan la calidad de un proceso sin saber si lo hemos resuelto o no y por qué.

Gestión en la Innovación y la Creatividad en las Organizaciones

Considero que hay 3 elementos favorecedores o limitadores de la cultura creativa e innovadora en las Organizaciones que, no por obvios, se gestionan adecuadamente:

1. Los límites de la Dirección no son los límites de la Organización
2. La cultura participativa permite extraer y aprovechar mejor el conocimiento contenido en la Organización
3. Las fuentes de información más fiables no suelen ser las fuentes de información más usuales.

Naturalmente, para cada empresa estos factores no son determinantes de igual manera. Cuanto, más basada en el conocimiento sea un actividad y más alto en nivel formativo de sus empleados, mayor será el valor contenido en los elementos mencionados.

1. Los limites de la Organización y los límites de la Dirección
Es frecuente que los equipos directivos equiparen su confianza o capacidad para asumir retos a la capacidad de la Organización en su conjunto. Este "sentimiento" se convierte en algo positivo cuando el nivel de autoconfianza de la Dirección es alto y se convierte en un elemento tractor para todos los empleados. Pero cuando la confianza o capacidades de la Dirección son bajas, se convierten en un elemento limitante para toda la Organización que percibe un bajo nivel de exigencia o de reto.

2. La extensión de la participación y sus consecuencias sobre la cantidad y la calidad
Las responsabilidades de los niveles gestores, en la estructura organizativa de las empresas, suele extenderse más allá de lo que es específicamente gestión. Esta circunstancia puede tener diferentes razones o combinación de ellas: baja calidad en la comunicación con los colaboradores, presunción de mayor y mejor visión que el resto del equipo, deseo de controlar y protagonismo, incorporar contenidos más creativos al trabajo, etc. Las consecuencias de esta práctica suelen ser el desaprovechamiento de capacidades colectivas y empobrecimiento de la orientación al cliente, negocio o calidad así como la atenuación del nivel de predisposición y compromiso de las personas.

3. El valor de las fuentes de información "independientes" dentro de la empresa
En las Organizaciones fuertemente piramidales la interlocución suele ejercerse principalmente entre niveles contiguos y por consiguientes como vía, casi exclusiva, de comunicación de la Dirección aparece en nivel inmediatamente inferior. Esta situación ofrece el riesgo de que la información transmitida esté demasiado supeditada al deseo autojustificar calidad, cumplimiento de objetivos o voluntad de generar confianza en el nivel superior. Por consiguiente es importante identificar fuentes de información, de contraste, menos susceptibles de aportar segundos intereses.

Sobre la jerga científico tecnológica y su reflejo o consecuencias en la sociedad

Considero que uno de los síntomas que más evidencian la baja sensibilidad de la sociedad española respecto al conocimiento en general y la tecnología en particular es la jerga inventada, supongo que por los medios de comunicación y aceptada y aplicada por casi todos. "Tecnología" parece ser todo lo que tiene que ver con las tecnologías de la información y la comunicación (hardware, software, telefonía, TDT, etc).

Subvencionar la compra de un PC para bajarse películas y ver sexo, por ejemplo, es promover el "Desarrollo Tecnológico". "Ciencia" está habitualmente asociado a ciencias de la vida y astrofísica. Lo demás es un cajón de sastre que podría englobarse bajo el término "Ingeniería". Para el mundo industrial, I+D+i engloba el Desarrollo de Producto (que puede representar más del 90% de la actividad técnica de una empresa) y que ni mucho menos es I+D, sino renovación de la gama de producto. Por supuesto, en el proceso de Desarrollo de Producto se incorpora toda la innovación posible que permita actuar sobre las claves de negocio (coste, prestaciones, calidad, capacidad de fabricación, etc.).

La Administración acepta de buen grado que las empresas incorporen el Desarrollo de Producto en el apartado I+D+i. Sin embargo, en los Programas de Incentivación a la I+D+i que diseñan las Administraciones, explicitan que las temáticas de proyecto deben ser claramente pre-competitivas y de marcado carácter científico, aunque esto implique generar conocimiento de aplicación a largo plazo y de alto riesgo de fracaso. ¿No se puede interpretar esta situación como una clara contradicción que nada favorece la sincronía entre necesidades de la industria y capacidades de los Agentes Tecnológicos? ¿Por qué nos da miedo decir que debemos de orientar una gran parte de nuestros activos tecnológicos a ayudar a las empresas a fabricar y comercializar mejores productos?

Considero que ya sabemos cuales son las peculiaridades de nuestro tejido industrial que no se parece mucho al alemán, holandés o finlandés. Considero que sería muy difícil de argumentar, con datos, que nuestro país necesita más I+D que innovación u optimización y Desarrollo de Producto y Procesos. En este contexto se explica lo que está ocurriendo en nuestra sociedad. En cuestión de días, incluso de horas, pasamos de decir que la Innovación es el elemento principal que debe promover el cambio de modelo de crecimiento económico, a ser una de las primeras partidas económicas que se recortan.

Por supuesto que, en el orden de prioridades para amortiguar, en el corto plazo, las consecuencias de esta crisis, parece razonable que no esté la I+D+i no esté en las primeras posiciones. Pero considero que sí lo está, poner en marcha toda nuestra capacidad científico - tecnológica al servicio de la sociedad en general y del tejido industrial en particular. Posiblemente nuestro planeta está más necesitado de un cambio de modelo que de I+D+i pero, mientras la masa crítica que comparte este sentimiento no aumente o la fuerza de los hechos nos obligue a ello, deberemos seguir "sobreviviendo" de la mejor manera posible en el actual escenario socio - económico global.

Sobre como se cumple el VI Plan Nacional de I+D+i (2008-2011)

Los científicos, preocupados por la congelación del I+D El incremento de inversión para 2009 es seis veces menor de lo previsto 

"La Confederación de Sociedades Científicas de España (COSCE), una entidad que agrupa a más de 30.000 investigadores, mostró ayer su preocupación por la congelación del presupuesto del Gobierno para I+D+i. En uno de los dos informes que presentó ayer, COSCE apunta que en los Presupuestos está previsto destinar 9.637,04 millones de euros a investigación científica y tecnológica en 2009, lo que supone un incremento del 2,5% sin contar con la inflación. La cifra se aleja mucho del incremento anual de recursos del 16% previsto en el VI Plan Nacional de I+D+i (2008-2011).

La intención es lo que cuenta

Dicen que no es el cuchillo, sino la intención de quien lo utiliza. En los procesos de cambio, evolución, desarrollo, innovación... no es verdad que lo determinante sean los métodos y herramientas. El factor crítico que más influye en el resultado es la intención de los involucrados, y especialmente de los que dirigen el proceso. 

Decía un afamado terapeuta que cuando un paciente realmente quiere curarse, basta soplarle suavemente para que lo consiga. Las herramientas pueden ser las mismas, pero no obtiene el mismo resultado quien aspira a controlar una organización que quien aspira a ayudarla a desarrollar su máximo potencial. Y, por supuesto, a menudo no basta preguntar a alguien para conocer su auténtica intención... a menudo a uno mismo le cuesta entender la suya propia, conocerla y, sobre todo, reconocerla... Alfonso Longo - 30 de Abril de 2009 http://www.alfonsolongo.blogspot.com/

La I+D+i, tangible o intangible

Pasan los meses y los años y los políticos, empresarios, comunidad científica y ciudadanos en general siguen diciendo que la Innovación es un asunto con alta incidencia sobre el saludable desarrollo económico de un país. Las empresas y los Agentes Tecnológicos siguen reclamando más fondos para igualarnos a los socios europeos con los que quisiéramos compararnos.

Los políticos crean programas para incentivar la I+D+i a los que destinan importantes partidas económicas ("…aunque todavía insuficientes"). Con una frecuencia frenética se inauguran Parques Tecnológicos, Centros de Investigación en Nanotecnologías y Ciencias de la Salud, casi siempre en edificios singulares. Las empresas de artes gráficas y la infografía se ocupan de elaborar prospectos, Annual Reports y documentos de intenciones a juego con los colores corporativos elegidos para estas "instituciones".

Pero… ¿Donde están los resultados? ¿Cómo vuelve multiplicada esta inversión a la sociedad? Da la sensación de que la I+D+i en España es más gasto que inversión. Parece que el fin son las inauguraciones, las memorias técnicas y las actividades administrativas para conseguir y justificar los fondos recibidos. Por supuesto algo…algo se consigue pero ¿es suficiente?, ¿es rentable la I+D+i en España?

Creo que, por ahora, no es rentable para la sociedad en general y el tejido productivo en particular. ¿Es cuestión de tiempo? ¿De dinero? ¿De conocimiento? ¿De organización? ¿De voluntad real? ¿De cultura empresarial? Posiblemente de todo un poco. Pero es absolutamente imprescindible diseccionar los factores que afecta a los resultados de la I+D+i y obtener conclusiones respecto a cómo mejorarlos y, si es posible, implantar y controlar las medidas que de estos planes se deriven.

No nos instalemos en la idea de que los resultados de la I+D+i se materializan a largo plazo. Es sencillamente falsa cuando se analiza la globalidad de la actividad. No transformemos la I+D+i en un intangible porque no lo es. Es cierto que "se vive mejor" gestionando actividades intangibles porque en el mundo de lo tangible los resultados se justifican solos. Evidentemente hay actividades científicas pre-competitivas, cuyo objetivo esencial es la generación de conocimiento, que no pueden ser medidas con criterios de competitividad a corto o medio plazo. Igualmente hay programas de investigación trabajando en necesidades sociales planetarias que difícilmente encontrarían un cliente que financie o rentabilice estos trabajos. Pero al mismo tiempo, hay muchos recursos económicos destinados a desarrollar I+D+i industrial, para los que el cliente son empresas que ya operan en le mercado y que sí se rigen por criterios de rentabilidad en "todas" sus actividades para las que el "largo plazo" no existe.