Para qué sirven los World Café

El mundo de las ideas, del conocimiento, de la innovación, de la respuesta a los problemas y oportunidades, gira en torno a la cantidad, a la excelencia al hacer las cosas, a la asunción de riesgos y a la aceptación del fracaso. Y fundamentalmente se soporta en la voluntad real de querer generar y movilizar ideas con una finalidad. Para ello, la participación de variados perfiles personales y profesionales puede contribuir a aportar cantidad y calidad a las ideas.

El conocimiento y visión de los especialistas no tiene por qué diluirse en un océano de motivación e imaginación profana. No obstante, nunca he creído en la hoja en blanco. Por razones de economía de recursos, aportación de estímulos y aprovechamiento del silo de ideas ya existente, considero que es más práctico partir de conocimiento estructurado que de una hoja en blanco. Eso sí, un conocimiento preliminar cuestionable, modificable, sustituible y, en definitiva, no presentado como premisa de partida. Tampoco comparto el bajo nivel de exigencia de muchos "ejercicios colectivos" de generación de ideas.

Cuando movilizamos a personas y tratamos de ilusionarlas y motivarlas para que aporten y compartan ideas con una finalidad, tienen que sentir que esas horas de trabajo son valiosas y que los resultados también deben serlo. En ocasiones, parece que la generación de ideas forma parte del mundo de los juegos o la diversión y que para hacer las cosas de aplicación práctica debemos utilizar los procesos de siempre, de la única manera posible…la del que manda. Esto, fundamentalmente denota escasa voluntad y confianza en las personas y las ideas, principalmente las nuevas ideas.

Hace unas semanas Innobasque (Agencia Vasca de Innovación) anunció que pretendía movilizar a 5000 personas del País Vasco en una jornada denominada Woka Euskadi, con el objetivo de buscar soluciones y alternativas a la crisis. Pero, ¿Cuántas personas movilizaron? ¿Cuáles han sido los resultados de esa movilización? ¿Cuántas ideas no obvias han sido generadas y con que nivel de factibilidad de implantación? ¿Por qué todavía no ha sido comunicado el valor extraído de esa acción colectiva? O ha sido solamente un ejercicio, una escenificación, una prueba piloto o…nada. Echemos cuentas: 5000 personas x 4 horas x 35 €/hora (por ejemplo) = 700.000 € sin incluir los costes de preparación, difusión, etc. ¿Cómo recuperamos, multiplicado, ese coste para la finalidad prevista?

Considero que el coste social de estos ejercicios es todavía mayor que el valor negativo que, en demasiadas ocasiones, genera. Lo malo no es que no rentabilicemos "para el fin anunciado" la inversión, sino que transmitamos a los participantes que estas cosas son solo un juego. Construir cultura innovadora en una sociedad es un tema difícil que exige, como para todo, voluntad, ideas, metodología y capacidad de gestión. No es imprescindible que toda la sociedad comparta y se implique en estas actividades pero sí que todos los implicados remen en la misma dirección.

1 comentario:

  1. Resultados de Woka Euskadi:

    http://www.innobasque.com/home.aspx?tabid=734&idElementoBiblioteca=60

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